¿Sabías que existía pintura ecológica? El diseño de interiores apuesta por fuentes y recursos sostenibles para colaborar en el cuidado y respeto del planeta tierra.
La pintura ecológica se convierte en un sustituto casi perfecto del petróleo, sus derivados y los productos sintéticos. Estos materiales son desplazados y en su lugar se utilizan aceites vegetales y distintos tipos de resinas. Se trata de una fórmula novedosa que reúne todas las ventajas de la pintura tradicional, pero sin tantos elementos nocivos. La pintura ecológica mantiene características como: durabilidad y resistencia, con acabados igual de estéticos que los comunes.
La eliminación de estos factores no es total, sin embargo, supone una reducción y por lo tanto un cambio que favorece al medio ambiente y a nuestra salud. En el mercado se comercializan distintos tipos de pintura ecológica: por un lado, podemos encontrar pintura vegetal, que utiliza extractos naturales y por otro lado, la mineral por utilizar sustancias minerales para su proceso de fabricación.
La mejor forma de cuidar el planeta requiere de compromisos que a futuro, obtendrán un resultado positivo. La aplicación de productos ecológicos y sostenibles en áreas como el diseño de interiores permiten resultados capaces de mejorar nuestra vida y la de generaciones futuras.
