El concept art es la disciplina dentro del mundo del videojuego que diseña conceptos e ideas mediante la ilustración. Su aplicación se traduce a la fase de visualización de algunos proyectos. Abarca desde diseños de personajes a objetos de juego. Y en las grandes empresas hay profesionales especializados en cada una de las ramas de trabajo, pero en las pequeñas se divide entre pocos artistas todo el trabajo.
Un concept artist requiere de puntualidad, versatilidad, imaginación y gran capacidad de trabajo. Y a la hora de desarrollar su trabajo se puede utilizar cualquier medio gráfico.
Se necesita trabajar rápidamente en el aspecto que tendrá el videojuego. Para ello lo primero que se genera son los mood boards, que son la fase de documentación sobre referencias de fotos, películas o lugares que puedan ayudar al concept artist a trabajar más rápido.
Tras ello cada empresa trabaja el diseño de personajes de forma distinta. Veremos rápidamente dos de ellas.
Una de las vías de trabajo es estudiar la personalidad del personaje antes de comenzar a abocetarlo. Se puede estudiar su historia de fondo y hacer preguntas sobre sus experiencias, el rol en su vida, manías o comportamiento. Esta forma de empezar es mucho más exhaustiva y quizás más lenta.
La otra forma de trabajar, tal y como hacen por ejemplo en la empresa Valve, es partir de siluetas negras para comenzar a ver la forma del personaje. En base a eso corrigen los pesos y se van haciendo diferentes siluetas con variables. Es necesario que de entre todas las siluetas podamos diferenciar al héroe del villano. Esta forma es mucho más intuitiva y rápida.
Elijamos una forma u otra, siempre trabajaremos desde el conocimiento del mercado de videojuegos, estudiando la competencia e intentando aportar un valor personal y único.
